Ya tengo pruebas de que la bastarda vasca me acosa, acaba de mandarme un mensaje, a pesar de todas las torturas.

Espero que la vida sea para ti como una planta de arroz, que por cada semilla que siembra, recoge cien.

Acabo de borrarlo, del asco que me dá no quiero tener nada de mierdas de estas.

Así que si alguien me dice algo por esta entrada tengo dos opciones: decir, ya lo siento, no encuentro el email, igual me confundí, haré una fe de errata, o la segunda, como el email existe, y ha sido enviado, depender de que Microsoft quiera darme una copia.

En cualquier caso estoy pensando que ella también es bastarda, (de eso no tiene la culpa, como yo), pero ella ha podido vivir su vida, y además se ha bebido la mia.

Tengo dudas  en este sentido, por lo de la iglesia y los hijos nacidos fuera del matrimonio, que no reconoce por este motivo. (Acabo de mandar un mensaje al papa para que arroje luz sobre mi idea de abandonar la iglesia si no soy feligresa de pleno derecho; es lo que tiene internet, que tiene estas cosas buenas).

A ver que me dice.

Nota: hablo en serio, he hecho un pantallazo del mensaje que le he mandado en Facebook, (ahí donde lo veis, el Facebook, digo). Con las cosas serias no se bromea.